centro de reflexión, encuentro y solidaridad
ONE RESPE es una expresión de acogida en creole propia del campesinado haitiano significa Honor y Respeto.
Creemos que cada persona, cada cultura, cada pueblo merece honor y respeto. En sociedades como la nuestra, marcada por la desigualdad, por formas tradicionales y modernas de opresión y explotación, el Honor y el Respeto son aspiraciones insatisfechas de la mayoría, y aun más de la población de inmigrantes pobres.
Para satisfacer estas aspiraciones hay que luchar por la democracia, enfrentar la discriminación, la exclusión, los prejuicios sociales. Trabajar por la solidaridad y en contra del racismo y de la xenofobia requiere del sostén de una estrategia educativa a mediano y largo plazo. En nuestro aporte a la construcción de dicha estrategia las Escuelas Comunitarias, como las que tenemos en Gurabo y en Bella Vista, son una pieza clave.
Las Escales Comunitarias son:
Las Escuelas Comunitarias (EC) son proyectos de educación intercultural. Están enmarcados en una estrategia de organización comunitaria, en vecindarios marcados por el racismo, la segregación, la pobreza, y la exclusión. Las EC trabaja con niños, dominicanos, haitianos, dominicohaitianos, entre las edades de 1 y 12 años. Son estas las etapas de conformación de la estructura de la personalidad y de la interiorización de roles y modelos de actitudes y de comportamientos. Estos niños pobres enfrentan, de partida, una estructura de representaciones que los sitúan dentro de relaciones de dominación que los define, al ubicarlos en una escala axiológica jerarquizada. Un proyecto educativo liberador debe de tomar en cuenta las consecuencias, la presencia, las marcas del racismo y de la xenofobia en esta población –y por extensión, en amplios sectores de la sociedad- y desarrollar propuestas educativas y de “terapia social e individual” para superarlas, en el ámbito local y de la colectividad.
Como bien reza nuestra consigna: “el racismo mata el amor, divide el pueblo, destruye la democracia”. La lucha contra el racismo y la xenofobia requieren del desarrollo de propuestas y programas que fomenten la toma de conciencia en favor de la solidaridad, el respeto a los derechos, la cooperación y la democracia plural.
Las EC permiten: estudiar la dinámica de los prejuicios sociales y de las mentalidades que conforman, según se manifiesta en esta población infantil; ensayar programas educativos que combatan la discriminación; y sugerir reformas a incorporar en el sistema educativo y en la labor de concienciación de los sectores populares. Genera propuestas que pueden ser incorporadas por otros actores sociales en las estrategias de educación y organización popular. Alienta empeños de explorar y construir identidades culturales populares. Contribuye así al empoderamiento de las comunidades y poblaciones oprimidas y discriminadas.
En la experiencia de OR, las Escuelas Comunitarias (EC) han sido medios para crear comunidad y fomentar la emergencia de prácticas e instituciones solidarias, de cooperación y convivencia, en vecindarios multiculturales, de inmigrantes pobres, discriminados, segregados, donde no existen esos lazos. Proponen construir el sentido de comunidad desde las EC. Surgen como respuestas a las necesidades identificadas por las comunidades. A la vez, la oferta de ese “servicio” permite potenciar esa comunidad: crean un espacio físico comunitario donde no lo hay, un lugar de encuentro para los distintos grupos de la comunidad. Es también lugar que puede ser de oración y planificación, de diversión, de organización y coordinación. Las EC crean organizaciones comunitarias, las Asociaciones de Padres, Madres y Amigas de las Escuelas, promueven el desarrollo de otras (Comités de Salud, Equipos de Derechos Humanos, Asociaciones de Mujeres, grupos de jóvenes, Comunidades Eclesiales de Base), de programas de educación comunitaria, campañas contra la discriminación, y fomentan la revalorización cultural (campamentos de verano y celebraciones) y la “mediación solidaria intercultural”, la práctica de que nacionales dominicanos acompañen a los inmigrantes cuando necesitan de los servicios de instituciones públicas o cuando son requeridos por las autoridades.
ONE RESPE está comprometido con un amplio programa de derechos humanos, en particular, los relativos a la población de inmigrantes y de trabajadores inmigrantes. ONE RESPE promueve cursos de formación de promotores legales (o de derechos humanos) comunitarios, ha participado de lleno en las discusiones acerca de la política y legislación sobre asuntos de migración y en campañas para inscribir y dotar de documentación a nacionales dominicanos que carecen de ellos.
En la actualidad ONE RESPE desarrolla un programa comunitario de promoción de salud en 12 comunidades de Santiago y en Haina. Ha llevado a cabo cursos de formación de promotores comunitarios de salud. En el último año, ha dedicado particular atención en nuestras comunidades de trabajo a la prevención del SIDA y al acompañamiento de personas HIV .
Este programa es sostén de las escuelitas, del trabajo en salud, y del trabajo comunitario en sentido general. Nuestro equipo: (a.) evalúa y da seguimiento de toda la población estudiantil de las escuelitas. (b.) Trabaja con los padres y las madres y familiares de los estudiantes; (c.) ofrece servicios de terapia a la comunidad, en particular a personas en situaciones críticas como es el caso, por dar un ejemplo, de mujeres y niños/as víctimas de violencia doméstica; y (d.) da seguimiento y apoyo a las personas VIH ; (e.) apoya el programa de capacitación de docentes que ofrece ONE RESPE a la Secretaría de Estado de Educación.
El Taller representa una iniciativa significativa que combina el desarollo de las posibilidades creativas del trabajo artesanal con la exploración de formas de autofinanciamento que resultan necesarias al plantearnos el futuro de ONE RESPE. Crea, produce velas ornamentales, jabones artesanales, tarjetas para diferente ocasiones, cajitas decorada a mano. El Taller ha ofrecido también cursos de elaboración de velas y jabones a grupos de mujeres dominicanas y haitianas miembros de organizaciones hermanas. Recluta su personal de nuestras comunidades de trabajo y ofrece, ademas, cursos de pintura para jovenes y adultos. Los beneficios obtenido de la ventas de artesanias son el pricipal sostén del Programa de acompañamiento de personas viviendo con VIH/SIDA y contribuyen al funcionamento de las Escuelas Comunitarias.